リバー、流れないでよ (Junta Yamaguchi, 2023) – 87 min. –
River (Título internacional)

En una casa de huéspedes japonesa el tiempo empezara a doblarse y sus huéspedes se verán atrapados en un bucle. Cada 2 minutos volverán a su posición inicial.

Magistral película japonesa. En la línea de la película, Más allá de los dos minutos infinitos (2021). En este caso en lugar de ver el tiempo desfasado entre dos pantallas que entran en bucle tendremos una zona donde el tiempo se pliega entre sí.

Cada dos minutos, todo volverá a su situación inicial. Todo se restablecerá menos las mentes de los afectados dentro de la zona de la casa de huéspedes a la vera del río. Con lo cual irán cada vez cayendo más en la confusión, el caos y la comedia. Aprendiendo de lo que esta ocurriendo y desesperándose ante tal absurdo.

Nos presentamos ante una comedia muy muy bien llevada de apenas 90 minutos de duración. Donde la risa ira acudiendo a nosotros como el mismo río que surca la zona. Cada vez que una situación parezca que se estanca simplemente se saltará a un nuevo problema o confusión. Primero presentando un personaje nuevo, luego causando problemas entre ellos y luego generándose problemas por lo absurdo de la situación.

El trabajo de guión de esta película es simplemente materia de estudio, casi como si tratáramos de una obra de teatro. Un poco por debajo de su padre espiritual, donde la coordinación era algo brillante. En este caso se juega mucho más con los cambios de plano, con las transiciones a nuevas habitaciones y sorpresas (el disparo que se escucha tras uno de los saltos de bucle es algo genial, el gesto que produce en la cara del espectador es para dar un aplauso).Hay muchos más personajes en este caso y sus relaciones son mucho más elaboradas, generando historia simplemente a partir de ellas. El personal del hostal, el personal de cocina, la pareja de colegas tomando algo, el cazador y la pareja de escritor y encargado de la editorial. Un detalle de la calidad de la película es el hecho de que haya una gran evolución de casi todos los personajes. De la misma forma que el agua pasa por un río nunca es la misma, las personas nunca son las mismas en dos momentos diferentes. Y en este caso, tras cada salto. Sea a base de desesperación, suerte o dialogo se evoluciona. El río no es solo el escenario sino la inspiración del cambio. Que de hecho se muestra en el constante cambio de las estaciones del escenario.

Un escenario simplemente precioso y bello, un paraje natural que es arrebatador y que ante los cambios de escenario no para de mejorar (me quedo con la estación invernal en ese paraje).

Toda esta película transcurrirá sin ningún efecto especial, todo a base de un buen uso de cámara y cambios de plano para representar el salto en el bucle. Que es divertidísimo cuando empiezan a tener en cuenta las posiciones espaciales durante los cambios para ir a jugando a moverse o comunicarse de un lado a otro.Una muy buena película para ver partes muy importantes de la mentalidad japonesa. Como el hecho de intentar mantener la calma y las apariencias en mitad de las situaciones más desesperadas. Es la risa ver el personal del hotel justificando lo injustificable. O los pensamientos autodestructivos cuando se cree que ya no hay solución, como el caso del escritor o el cazador. Rematando con la aceptación de algo totalmente surreal como lo más normal del mundo, como ocurre con el personal o los dos colegas.

Llegamos a un final un poco apresurado pero muy en la línea del absurdo de la misma película (y que me recordó bastante a Getting Any? de Takeshi Kitano).

Una película, que a poco que te guste la comedia blanca, el absurdo y una buena estructura no debes de dejar de ver.

La frase: «El conductor de taxi ha aprendido a esquivar la curva al final».

La escena: La primera reunión para intentar descubrir que esta pasando. Es tan realista que duele.

Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2023

Nota del autor:

9,0 ███████ (Excelente)


TRÁILER V.O.:

 

Written by Oscar Hidalgo

Cinéfago demente