Glorious (Gilitte Leung, 2022) – 98 min. –
Un hombre que ha parado en una zona de descanso de carretera, se topa en el lavabo con un semidios, de tipo lovecraftiano que le dará conversación.
Maravillosa y divertida propuesta de Rebekah McKendry. Una idea muy original que ha conseguido arrancar risas de todos los espectadores.
Resumiendo mucho mucho, podríamos decir que es la película Locke sumándole un barniz lovecraftiano a la situación. Locke, por ser un solo actor interactuando con una voz en off (la del magnifico JK Simmons, lo recordareis como el Jonah Jamesson de Spiderman), siendo el actor principal Ryan Kwanten (de la serie True Blood) , encarnando a Wes. El centro de la acción.
El barniz viene por el contexto. Una deidad ultraterrena, ha decidido refugiarse en un lavabo de una parada de carretera, el destino le ha llevado allí. Ghatanothoa esta huyendo de su padre, el ser creador, para no cumplir con su cósmica misión. Para hacerlo necesitará de la colaboración de Wes. El único ser que puede evitar el fin de la creación como la conocemos.
Asi tendremos una película basada en diálogos entre Wes y algo que intuimos, pero no veremos jamás, tras la puerta de un lavabo. Una tensa negociación que nos llevará menos de 90 minutos (un punto para la película). En la que Ghat intentará convencer de la realidad y lo terrible de la situación que les rodea.
Siendo la actuación de Wes, soberbia, pasando por todas las fases posibles que se puede pasar ante tan surreal situación y la voz de Ghat algo glorioso. Ver un dios ultraterreno con una pronunciación perfecta y un uso del lenguaje encomiable es una delicia. Solo me ha faltado verle tomando té.
A partir de aquí tendremos un rodaje tenso, rápido, sin tiempo para tontearías y que va directo al grano. Que oscila entre el humor y las escenas con sangre a raudales.
En la narración destacó que se sepa jugar muy bien con los dos polos de la situación dándote indicios acerca de que Wes esta completamente loco, o que realmente si hay un dios en el lavabo. Incógnita que sabe mantenerse con acierto hasta el final.
Pero siendo sinceros, quien se iba a resistir a un dios exterior que solo te pide que complazcas a su envoltura física.
Los efectos especiales son muy buenos, mejorando a medida que avanza la película, y vamos descendiendo en el mundo pesadillesco que rodea la situación. Especialmente remarco la vez que se insinúa a Ghat (que me recordó a los breves destellos del film En la boca del miedo (1994)) y cuando se ven las dimensiones exteriores (que creo que representan, sin decirlo, con mucho acierto a Azathoth acercándose a nuestra dimensión).
Solo le echo en cara los 5 minutos del final, que aunque no quedan mal, son muy tramposos. Ya que repasando muy bien el metraje (y después de haberlo consultado con múltiples fuentes) no hay ningún indicio del giro final de la película. Y me parece entonces una solución apresurada para algo que no lo necesitaba. Se podría haber tirado de valor y entonces haber acabado sin dar una explicación.
La frase: «Tus genitales no son tan importantes, Wes».
La escena: La conversación inicial. Si alguna vez me topo con un ser ultraterreno así, quiero iniciar la conversación de una forma tan desenfadada.
Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2022
Nota del autor:
8,0 ████████ (Muy buena) (y si no llega a ser por el giro final, bien merece un 9)
TRÁILER V.O.:
