Valley of Concavenator (Víctor Matellano, 2022) – 73 min. –
Documental sobre la dinomania y las sinergias generadas entre el mundo del cine y la ciencia, en especial de la paleontologia
Trata con bastante cariño, el tema de la dinomania y como surgió. Como evolucionó y el impacto en los tiempos actuales.
Se centra en la explicación de la historia, a través de un dinosaurio ficticio, proveniente de la pelicula El valle de Gwangi (1969), rodada en cuenca. Y un dinosaurio real, el Concavenator, que se descubrió en España y es uno de los restos de dinosaurio más completos y mejor conservados.
Para hablar de ellos, se centrarán en dos personalidades. Colin Arthur, genio de la animación y efectos especiales, que aprendió de Ray Harrihausen, el padre de la animación stop motion. El cual había trabajado para La historia interminable (1984), 2001: Una odisea en el espacio (1968), Conan, el bárbaro (1982) y muchas, muchas más. Y Jose Luis Sanz, paleontólogo y miembro de la Real Academia de las Ciencias.
A través de sus explicaciones iremos viendo como empezó la influencia de los dinosaurios en nuestra psique, desde los origenes judeo cristianos, con la mención de los dragones. Y como la ciencia y el cine se han retroalimentado. Con generaciones de nuevos científicos siendo inspiradas por las películas de dinosaurios. Con por ejemplo el mismo Jose Luis, diciendo que una de sus fuentes de inspiración para ser paleontólogo fue Godzilla y El monstruo de los tiempos remotos (1953). O Jose Luis Bayona mostrando el Concavenator en la última película de Jurassic World.
Trata con mucho cariño todo el material, permitiendo explayarse a los personajes principales y haciendo muchas referencias al trabajo de Ray Harrihausen. Tanto explicando anécdotas, como algún dato científico curioso. Es un documental que habla mucho sobre la fascinación. Dándole en este caso un tono patrio, hablando del dinosaurio hallado en nuestras tierras.
Me gusta mucho un apartado de reflexión que se hace acerca de que todos, de pequeños, estamos fascinados con los dinosaurios, siendo la edad lo que nos hace olvidarlo (como si el meteorito hubiera impactado en nuestros cerebros).
Y por último el amor hacia las técnicas tradicionales de animación, que por mucho CGI que exista, se resisten a desaparecer.
Es un documental muy cortito y empaquetado al que solo le echo en cara dos cosas. Que no sea más largo (quién iba a imaginar que yo diría esto, me hago mayor). Pudiendo haber durado el doble si les dieran micrófono a los protagonistas. Que la presencia de las chicas como narradoras podría soslayarse, ya que no termina de funcionar muy bien. No es necesaria la presencia en pantalla de las falsas narradoras y bien podría ser la voz sin presencia en pantalla, para no tener que argumentar la necesidad del documental en si.
La frase: La cena iba bien hasta que le dije a Ray Harrihausen, que soy paleontólogo.
La escena: La escena post creditos, entre Colin Arthur y Pepelu.
Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2022
Nota del autor:
7,0 ███████ (Buena)
TRÁILER:
