Isabel (creador Javier Olivares, varios directores , 2012) – 70 min. / episodio
– 3 temporadas –
Resulta sorprendente que un país con la Historia que tiene España dedique tan poco cine y series a más capítulos que el «guerracivilismo» o la Segunda República. Los Reyes Católicos dieron forma y unidad a un único Reino que posteriormente se convertiría en el de España. Desde entonces, cientos han sido los episodios históricos que bañados en épica e intriga han ido conformando lo que hoy es la Historia de nuestro país. Esto son más de 500 años como lapso de tiempo para encontrar una buena trama y trabajar sobre ella.
La primera vez que vi anunciada Isabel me negué a verla, pues algo no me cuadraba: ¿qué hace la guapísima Michelle Jenner (No tengas miedo, 2011) caracterizada como la no tan agraciada Isabel I de Castilla? Guiado por mi prejuicio, erré en el instinto y aparqué la producción hasta que, un día, quise darle una oportunidad. La interpretación de Jenner era sublime, y el elenco que le acompañaba, brillante. Los diálogos, la ambientación, el rigor histórico (con sus más y sus menos como en toda ficción) y hasta la banda sonora me resultaron magistrales. Cada capítulo me dejaba con ganas de absorber toda la serie del tirón, repasar en los libros cada acontecimiento que se cita, y no hacía más que confirmar lo que indico al principio de este texto: ¡qué cantidad de cosas tenemos para hablar en España y qué poca atención le hemos prestado nunca a nuestra Historia!
La fotografía, de David Azcano, enmarca incluso escenas que representan algunas de nuestras obras pictóricas más afamadas, como La rendición de Granada, de Francisco Padilla, entre otras. Todo se cuida con mimo y maestría. La serie, con un ritmo vibrante, revive todos los personajes históricos del momento para llevarlos a la pequeña pantalla y hacer ver al espectador las intrigas que protagonizaron. Desde el Arzobispo de Toledo, Alfonso Carrillo (Pedro Casablanc) hasta el incómodo marqués de Villena, Juan Pacheco (Ginés García Millán) pasando por supuesto por sus majestades Isabel y Fernando (un convincente Fernando Sancho). Pero son muchos más los personajes que aquí, como en la Historia, se dieron cita, y harían falta muchas hojas para describir tanto las argucias de cada uno como las interpretaciones de los actores que con tanta brillantez les encarnan. Isabel es una serie que le hacía falta a España, por nuestra cultura y nuestra memoria.
Vemos que la historia de, por ejemplo, los EEUU, está en pañales en comparación con la nuestra, y en cambio son miles las producciones de toda índole que con orgullo (o con otro ánimo, pero al menos lo documentan) dedican a sus acontecimientos e incluso a muchos de sus personajes destacados (presidentes, militares, leyendas…). Esperemos que Isabel cambie ese ciclo. De momento, la serie fue sucedida por Carlos, Rey Emperador (protagonizada por Álvaro Cervantes), de menor calidad pero similar interés.
La primera vez que vi anunciada Isabel me negué a verla, pues algo no me cuadraba: ¿qué hace la guapísima Michelle Jenner (No tengas miedo, 2011) caracterizada como la no tan agraciada Isabel I de Castilla? Guiado por mi prejuicio, erré en el instinto y aparqué la producción hasta que, un día, quise darle una oportunidad. La interpretación de Jenner era sublime, y el elenco que le acompañaba, brillante. Los diálogos, la ambientación, el rigor histórico (con sus más y sus menos como en toda ficción) y hasta la banda sonora me resultaron magistrales. Cada capítulo me dejaba con ganas de absorber toda la serie del tirón, repasar en los libros cada acontecimiento que se cita, y no hacía más que confirmar lo que indico al principio de este texto: ¡qué cantidad de cosas tenemos para hablar en España y qué poca atención le hemos prestado nunca a nuestra Historia!
La fotografía, de David Azcano, enmarca incluso escenas que representan algunas de nuestras obras pictóricas más afamadas, como La rendición de Granada, de Francisco Padilla, entre otras. Todo se cuida con mimo y maestría. La serie, con un ritmo vibrante, revive todos los personajes históricos del momento para llevarlos a la pequeña pantalla y hacer ver al espectador las intrigas que protagonizaron. Desde el Arzobispo de Toledo, Alfonso Carrillo (Pedro Casablanc) hasta el incómodo marqués de Villena, Juan Pacheco (Ginés García Millán) pasando por supuesto por sus majestades Isabel y Fernando (un convincente Fernando Sancho). Pero son muchos más los personajes que aquí, como en la Historia, se dieron cita, y harían falta muchas hojas para describir tanto las argucias de cada uno como las interpretaciones de los actores que con tanta brillantez les encarnan. Isabel es una serie que le hacía falta a España, por nuestra cultura y nuestra memoria.
Vemos que la historia de, por ejemplo, los EEUU, está en pañales en comparación con la nuestra, y en cambio son miles las producciones de toda índole que con orgullo (o con otro ánimo, pero al menos lo documentan) dedican a sus acontecimientos e incluso a muchos de sus personajes destacados (presidentes, militares, leyendas…). Esperemos que Isabel cambie ese ciclo. De momento, la serie fue sucedida por Carlos, Rey Emperador (protagonizada por Álvaro Cervantes), de menor calidad pero similar interés.