귀공자 (gwigongja) (Park Hoon-jung, 2023) – 118 min. –
The Childe (Título internacional)

Un joven coreanofilipino esta pasando por un mal momento con su madre aquejada de una enfermedad que no puede tratar por falta de dinero. De repente su padre, al que no conocía, hará acto en escena reclamando su presencia.

Película que me ha sorprendido en el desarrollo de personajes, que no de la historia en si, que se capta desde los primeros cinco minutos. Si estas atento o has visto cuatro películas de este festival, cosa que nuestro protagonista no ha hecho. Y así le va, dando vueltas de un lado para otro.

Nuestro joven, objeto de discriminación por ser un «kopino» (termino para definir mestizo coreanofilipino) malvive como luchador de muay thai y apostador compulsivo. Intentando buscar a su padre sin éxito para que le ayude a pagar la operación para su amada madre.

De un minuto para otro se desvela la presencia del padre. Enfermo terminal que quiere conocer a su hijo, al que abandonó, antes de morir. Para ello, como multimillonario que es, enviará a sus hombres a escoltarlo y no reparará en gastos. Le esperará con los brazos abiertos… y una bañera de hielo. Vamos, ¿nadie se lo esperaba?

Y hasta aquí podríamos decir: pobre chico protagonista, perseguido por la pureza de su alma y su gran corazón… ¡Pues NO! Pero no porque no le persigan, sino porque no es el protagonista. Porque con la autoridad que me otorga el estar escribiendo esto y que me de realmente igual lo que haya tras las puertas de Tanhauser, he decido tras largo debate conmigo mismo que el protagonista es EL PROFESIONAL. ¿Por qué en mayúsculas? Porque cuando eres tan inmenso y te robas toda una película es mejor que pongas su nombre en mayúsculas, no sea que se enfade.Ante nosotros tenemos un thriller de acción, donde unos mafiosos perseguirán al objeto del deseo. Unos mafiosos intentarán matarlo. Unos asesinos intentarán protegerlo. Otros intentaran matarlo. Unos médicos irán y volverán a una sala de operaciones como si no tuvieran nada que hacer en su día a día. Una joven flirteará sin tapujos con el incesto. Un hijo con el parricidio. Otro hijo con fantasías bíblicas relacionadas con Caín y Abel sin saberlo. Persecuciones. Muerte. Comedia. Trazados urbanos del siglo pasado… y en mitad de todo el caos tendremos al profesional (leedlo con mayúsculas, es importante).

Alguien que realmente irá haciendo avanzar la trama (como si se hubiera leído el guión). Con una sonrisa y un traje impecable nos regalará grandes frases dignas de maravillosos psicópatas adorados por el cine. Que flirteará impune con momentos Matrix (realmente esa escena sobraba, pero quien se niega a tirarse desde un puente y caer como un campeón). Al cual la cámara adorará y nos ira regalando excelentes escenas de películas de asesinos y de acción. De hecho durante mucha parte del metraje pensé que, de no ser el origen coreano de la película, bien podría ser un protagonista slasher de los 90.Como película es interesante y realmente tiene muy buen ritmo. Es intensa, hay sangrecilla y no se andan por muchas tonterias. Podría echarles en cara el hecho de ser, como película coreana que es, una con múltiples finales, que siempre alarga. Para explicar la película y añadir detalles finales. No somos estadounidenses, no necesitamos de estas zarandajas. Hemos de agradecer este buen hacer al director Park Hoon Jung (director de The new order, una joya)

De hecho, para ser una película coreana, hay armas de fuego de más. Normalmente en la escala de mafias se estilan más los palos y cuchillos, pero aquí tenemos escopetas de caza a tutiplen que harán nuestras delicias. Aderezado por centenares de mafiosos que no saben usarlas con cerebro ni distribuirse de forma eficiente es receta de éxito segura.

A cada escena de acción o de tensión tendremos el aderezo de un momento cómico para relajar presión. Realmente el ritmo esta muy bien cogido en la película. Lo único que puedo echarle en cara es no llevar al extremo ninguno de sus géneros. No es un súper drama, ni una película de acción extrema, ni un gran thriller. Navega entre esas aguas simplemente.

A remarcar la actuación de Kim Seon Ho que reconvertido de películas de comedia romántica a asesino profesional ha encontrado su camino en la vida, espero por el, ya que se come el solito la película.

Acción entretenimiento y risas, muy recomendable

La frase: «Soy tu amigo, el último que veras antes de morir».

La escena: La pelea final, simplemente exquisita.

Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2023

Nota del autor:

8,0 ███████ (Muy Buena)


TRÁILER:

 

Written by Oscar Hidalgo

Cinéfago demente