Esta serie nos devuelve a los años 80 para contarnos el principio del ordenador personal que se convertiría en el que todos tenemos hoy en día. Lo hace de una forma interesante y entretenida que por supuesto incluye algo de lenguaje técnico en sus diálogos pero no resulta complicada de seguir ya que cuenta con un buen equilibrio argumental.
En los primeros capítulos, conocemos a nuestros tres principales protagonistas; Joe MacMillan (Lee Pace, El Hobbit: la desolación de Smaug, 2013) un misterioso personaje que siempre va con trajes perfectos, conduce un cochazo y tiene una actitud un tanto soberbia. Gordon Clark (Scoot McNairy, Perdida, 2014), trabajador de una empresa informática casado y con dos hijas que vive con el lastre de un proyecto fracasado creado junto a su mujer, y Mackenzie Davis (Cameron Howe, Amigos de más, 2013) una joven prodigio de la programación.
Los tres se encuentran gracias a la mano de Joe Macmillan que siempre parece tener (o querer tener) el poder de mover todos los hilos.
En un principio los personajes parecen algo planos y tópicos pero a medida que avanzan los capítulos y una trama bien sostenida, se aprecia una evolución y complejidad dramática en cada uno de ellos y en el todo de la serie. Las intríngulis personales y profesionales de nuestro trío protagonista, crean una red de consecuencias en su alrededor que va provocando toda clase de efectos colaterales en todo y todos lo que les rodean, que los creadores han sabido tejer efectivamente.
El reparto hacer un gran trabajo, cabe mencionar a Toby Huss (Sobran las palabras, 2013) excelente como John Bosworth, el director de la empresa informática en la que se centra la serie y a Kerry Bishé (Argo, 2012), que interpreta a Donna Clark, esposa de Gordon, que va tomando fuerza a medida que avanza la temporada.
Se hacen numerosas menciones a ordenadores, empresas e incluso a un famoso anuncio de televisión que harán las delicias de los aficionados al mundo de la informática aunque la empresa para la que trabajan en la serie es ficticia. También por supuesto a algunos personajes como Steve Jobs o Ada Lovelace. El capítulo en el que asisten a la convención COMDEX con la aparición de presentaciones de «novedosos dispositivos» es estupendo.
Es necesario hacer una mención de honor a la fantástica entradilla, totalmente adictiva, que cuenta con un arreglo de la canción Still on fire de Trentemøler.
Tras esta potente primera temporada AMC ha anunciado la renovación para una segunda.
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