Título original: Bad Lieutenant
Año: 1992
País: EEUU
Primera proyección: Canada, 16 Sept. 1992 (Festival de Toronto)
Duración: 96 min.
Director: Abel Ferrara
Guión: Abel Ferrara, Zoë Lund, Victor Argo, Paul Calderon
Música: Joe Julia
«Herético film […] Keitel no tuvo ningún pudor en realizar secuencias que podrían humillar a cualquier actor de renombre […] Y todo ello queda fielmente plasmado en la pantalla, quedando a veces frente al espectador la duda de si lo que esta viendo es una mera interpretación o realmente está sucediendo […]».
En el corazón de una gran ciudad, un teniente de policía (Harvey Keitel) deambula entre sus calles y mientras realiza sus horas de trabajo, utiliza su autoridad para alimentar sus vicios: su adicción a las drogas, al juego y pisotear cualquier principio por el cual ha jurado defender. Su decadencia parece no tocar fondo, hasta que un día caerá entre sus manos el caso de una brutal violación a una monja (Frankie Thorn).
Del resto del «anónimo» reparto -ya que todos los personajes de la cinta están carentes de nombres propios- resaltar las interpretaciones de la modelo Frankie Thorn como la monja (adoptando el rol de una Virgen María) y los momentos de éxtasis de la camella Zoë Lund (verdadera heroinómana) que también ayudaría en el guión.
La música la lleva a cargo el genial Joe Delia, apenas audible en la película, donde la banda sonora es casi tomada por las emisiones deportivas en las cuales el teniente realiza sus apuestas y que se convertirán en el único «compañero de trabajo» que acompañará al teniente. Distinguiéndose la balada blues «Pledging my love» de Johnny Ace que se eleva como si de una plegaria se tratase, en los momentos más hundidos del teniente.
En el año 2009 el director Werner Herzog filmó (bajo la amenaza de muerte de Abel Ferrara) un remake del mismo nombre Teniente corrupto: port of call New Orleans (2009) donde se traslada la historia a Nueva Orleans, poniéndole el rostro del teniente el californiano Nicolas Cage. Con un aire más políticamente correcto, la lleva a cabo el mismo productor de la original, Edward R. Pressman.
Teniente corrupto, este herético largometraje, sería impensable que se hiciera hoy en día: por las productoras, por el público juvenil, por la Iglesia, por la sociedad conservadora… pero no por Abel Ferrara, el director incorrupto.
Lo mejor: la interpretación de Harvey Keitel.
Lo peor: demasiado cruda para ser digerida en una vez, abstenerse estómagos y corazones sensibles.
Nota del autor:
9,0 █████████ (Excelente)
COMENTARIOS DEL EQUIPO LGE
Sandro Fiorito
“Profundo, realista, descarado y angustioso retrato de un teniente […] sólida y deslumbrante interpretación de Keitel, que lleva al extremo su capacidad para encarnar a un tipo duro […] cuida con detalle los efectos que las drogas pueden producir […] escenas que obtendrían la firme condena de los religiosos por lo ofensivo hacia los mismos […] Nueva York se convierte en el inmejorable escenario en el que se desarrollan los acontecimientos, dando lugar a postales de una ciudad que oprime y vive con intensidad […]” 8.
Deja una respuesta