Cuando se habla de Macbeth en la historia del cine, inmediatamente llegan a nuestra mente las imágenes de las cintas de Orson Wells y de Polanski, obras muy distintas entre sí, pero que comparten ese beneplácito puesto de clásico incomprendido en sus días y venerado años después. Obras definitivas para diferentes generaciones de una de las tragedias de Shakespeare por excelencia, que vuelve a ser resucitada por el director australiano Justin Kurzel y protagonizado por Michael Fassbender en el papel del atormentado rey de Escocia y Marion Cotillard en el de Lady Macbeth, en la que me atrevo a decir será la versión de referencia de futuros cinéfilos.
La obra de Shakespeare comienza con las tres hermanas fatídicas, esas brujas que auguran a Macbeth como el próximo rey de Escocia, premonición que activará en su interior deseos de poder que hasta ahora desconocía, así que impulsado por las palabras de su esposa, decide asesinar al rey Duncan para así poder ocupar su lugar, ya en el trono el remordimiento derivará en locura, llevando a Macbeth a ejecutar una ola de asesinatos para conservar su corona.
La ambición desmedida y la culpa son los temas centrales de esta obra con tintes históricos, donde los protagonistas son víctimas de sus propios actos, de sus anhelos y deseos desenfrenados, los cuales deben aprender una lección a un precio muy alto. Una tragedia clásica a toda regla que ha sido adaptada tantas veces y en tantos formatos que es imposible escoger solo una, sin embargo, la propuesta de Kurzel, brilla por la belleza de sus escenarios, esa química entre la pareja protagonista y el dinamismo de sus secuencias, que sin perder el tono clásico que caracteriza a la obra, están llenas de violencia y oscuridad, más por lo que sugieren que por lo que se muestra en pantalla.
Fassbender y Cotillard combinan con elegancia y sutileza el tono visceral de sus personajes con sus ansias más íntimas, unas representaciones tan histriónicas que se adaptan por completo a la teatralidad de su puesta en escena, sin dudas otro de los grandes aciertos del film, un apartado visual que nunca consigue opacar a sus actores pero sí de resaltar su mundo interior a través de su fotografía y gélidas locaciones escocesas. Un balance perfecto que está concebido para ser disfrutado en pantalla grande, para dejarse seducir por sus actuaciones y perderse entre sus versos que denuncian las consecuencias de la crueldad y la avaricia humana.
Distribuida en España por A CONTRACORRIENTE FILMS
Vista en PASE DE PRENSA en el Festival de Cine Fantástico de Sitges 2015 el 14 de octubre.
Nota del autor:
8,0 ████████ (Muy Buena)
Película en CARTELERA a partir del 25 de Diciembre de 2015
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