La nueva película de Scott Cooper, Black Mass, es un trabajo atípico para haber entrado entre las Perlas del Zinemaldia. Una cinta totalmente convencional que encontrará su mayor éxito en salas y no en el recorrido por festivales. Abusa de todos los tópicos del policíaco con mafia de por medio, y pese a ello salgo de la sala bastante satisfecho. Pero poco a poco va perdiendo en mi cabeza, consciente de que sus virtudes -que tampoco son tantas- se repiten en miles de películas anteriores y de forma mucho más evidente.

En el sur de Boston, en la década de 1970, el agente del FBI John Connolly (Joel Edgerton) convence al mafioso irlandés James “Whitey” Bulger (Johnny Depp), un delincuente recién salido de la cárcel, para que colabore con el FBI y elimine a un enemigo común: la mafia italiana. Se formará así una nefasta alianza que provocó una espiral fuera de control, permitiendo a Whitey escapar del ámbito de la ley, consolidar su poder y convertirse en uno de los más implacables y poderosos gángsteres de la historia de Boston.

El mayor reclamo del tercer largometraje de Cooper es, sin ningún ápice de duda, Johnny Deep. Y es que, a pesar de no acercarse al nivel que demostró décadas atrás en trabajos como Donnie Brasco (1997), Deep ha vuelto ha dejarnos una interpretación de nivel. Sin embargo, ni su buen hacer delante de las cámaras ni el de Cooper tras ellas consiguen que la cinta sea más que correcta. El guión adaptado es bastante torpe, y la duración del metraje desorbitada. Recuperamos a un buen -y no más que eso- Deep en una película aceptable pero inmediatamente olvidable.

Distribuida en España por A WARNER BROS
Vista en PASE DE PRENSA en el Festival de San Sebastián el 25 de septiembre, San Sebastián-Donosti.

Nota del autor:
5,0 █████ (Mejorable)

 

TRÁILER:

 

COMENTARIOS DEL EQUIPO LGE

Sergio Cuenca
Tenía ganas de comprobar si Black Mass era tan buena como prometían y si sería algo más que ver a Johnny Deep metamorfoseado nuevamente. Visto el resultado final, la sorpresa ha sido mayúscula. Queda claro y es obvio que todo el peso del film recae en Deep, el cual está ya más que curtido en experiencia en lo de interpretar a gangsters, pues  ya lo hizo con Donnie Brasco (1997) y Enemigos Públicos (2009). No obstante, el personaje que interpreta Joel Edgerton también llama mi atención. Me llega a interesar más la transformación que padece su personaje –de policía moral a amoral- y como se adentra en esa espiral de la que cada vez le es más difícil salir, y más importante aún, de la que no es consciente. A su vez, su historia está conglomerada de todo un conjunto de personajes que van desde los más íntimos que hay alrededor de James Bulger, tales como su hermano Billy, interpretado por un correcto Benedict Cumberbatch o Steve Flemmi -al que da vida Rory Cochrane-, mano derecha de Bulger. Me gusta también el sentido que tiene en casi todo momento el tema de la lealtad y el honor, vitales para comprender el porqué muchos de los personajes hacen lo que hacen o acaban en la tumba si no lo son. Además, es la rotunda (y voraz) moraleja que se nos acabará quedando al final. No cabe duda de que el baluarte más importante de la cinta de Scoot Cooper es no solo ver a Johnny Deep convertido en James Bulger, sino que te creas que es el mismo James Bulger, cosa que se consigue ya que la sensación intimidatoria que transmite el protagonista es latente en todo momento al igual que el hecho de verlo como una autoridad a la que hay que respetar si no quieres acabar mal parado. Todo ello lo acabo percibiendo, comprendiendo el tipo de persona que debería ser. En definitiva, Black Mass cumple con creces y llegando al nivel de otras cintas de su género, con las que compartirá a partir de ahora un preciado lugar. Y es que, pese a que la cinta está plagada de actores de gran renombre como Kevin Bacon -el cual cumple muy bien su rol- o la misma Dakota Johnson -de la que hubiera deseado más protagonismo-, todos en mayor o menor medida ejercen bien su rol en esta biografía que se nos cuenta de alrededor de una década en la que se irá viendo a modo progresivo el ascenso de James Bulger. Todo ello como he mencionado más arriba, perfectamente narrado. 8.

Written by Iván Ginés