Título original: The natural
País: Estados Unidos
Primera proyección: EEUU, 11 May. 1984
Duración: 134 min.
Director: Barry Levinson
Guión: Roger Towne, Phil Dusenberry (basado en la novela homónima de Bernard Malamud)
Música: Randy Newman
“Una buena película a pesar de sus “peros”, al conseguir ofrecer un reflejo realista del significado más profundo del béisbol y entretener con una historia que introduce el drama dentro de una espiral deportiva”
Los valores más tradicionales de la población norteamericana, representados desde uno de sus deportes de mayor popularidad, el béisbol, en esta película dirigida por Barry Levinson («Sleepers«, 1996) con guión de Roger Towne y Phil Dusenberry, basándose en la novela de Bernard Malamud. Aupado el personaje principal por un buen Robert Redford, la cinta repasa la ficticia vida de Roy Hobbs, un excelente y muy completo jugador de béisbol (mágico bateando e imparable como pitcher) que, lleno de sueños, busca ver cumplida su intención de convertirse en el mejor jugador de la historia de este deporte.
Comenzando la trama con el joven Hobbs, que al cumplir 19 años también es interpretado por un Redford de 48 (hecho que descoloca bastante al espectador, al ser imposible asumir el ver a una persona bien entrada en edad y con imborrables arrugas en los ojos, encarnando a un ambicioso joven), la película acompaña la trayectoria de este jugador no profesional desde el punto citado hasta dieciséis años después, ya con la treintena de edad superada y con sus aspiraciones aún intactas pero difíciles de ver cumplidas por el gran obstáculo que le supone entrar como jugador en un equipo de béisbol desde la perspectiva de una promesa y con la edad de retirarse. Finalmente, acaba en los Knights, un equipo mediocre entrenado por Pop Fisher (Wilford Brimley, «La cosa» 1982, «Cocoon» 1985) y , quien no confía para nada en las facultades del jugador, recluyéndolo al banquillo, quedando así Hobbs a la espera de una oportunidad para poder demostrar su valía.
Así, la película busca cumplir un sueño desde los ojos de un personaje pero con toda una población detrás, la norteamericana, secundada por todos aquellos amantes de un béisbol que puede extender sus valores hasta cualquier otro deporte, dejando como metáfora el tópico de la superación y la constancia, sin olvidar que para conseguir llegar a la meta jamás hay que abandonar la pista, a pesar de los tumbos que puedan sucederse durante la carrera que uno persiga. Robert Redford («Dos hombres y un destino» 1969, «El golpe» 1973, «Todos los hombres del presidente» 1976) gusta y consigue livianamente emocionar, cegando a su personaje de unas emociones que no le impiden distraerse del deporte de manera incomprensible. Richard Farnsworth («Ana de las tejas verdes» (1985) | Serie de TV, «Una historia verdadera» 1999) acierta con la interpretación de un personaje frustrado pero también cargado de objetivos. Se agradece la presencia del siempre grande Robert Duvall («El padrino» 1972, «Open Range» 2003) como reportero deportivo y destacan las sólidas apariciones de Kim Basinger («Batman» 1989, «L.A. Confidential» 1997) y Glenn Close («Las amistades peligrosas» 1988, «Atracción fatal» 1987), representando, cual demonio y ángel respectivamente, la primera, lujuria, pasión y vida glamourosa, y la segunda recuerdos, estabilidad y emociones limpias.
No se perdona la incursión de un fallecimiento absurdo en pleno guión dramático, pues la muerte citada resulta cercana, aunque sin quererlo, a la comedia, todo para facilitar el carpetazo a una situación que busca facilitar las cosas a un determinado personaje. Bañada de cierto surrealismo por la espectacularidad de los golpes de Hobbs (las tormentas hacen su presencia en ocasiones de una forma alarmante para acompañar los home runs realizados por el personaje), «The natural» es una buena película a pesar de sus “peros”, al conseguir ofrecer un reflejo realista del significado más profundo del béisbol y entretener con una historia que introduce el drama dentro de una espiral deportiva y se permite el uso de la nostalgia y otras perspectivas que benefician a su conjunto.
El compositor, cantante y pianista Randy Newman («Ragtime» -1981- y saga Toy Story) lleva los compases de una adecuada banda sonora que se encuentra a la altura del nivel épico y dramático que la cinta consigue representar sutilmente.
Nota del autor:
7,0 ███████ (Buena)
COMENTARIOS DEL EQUIPO LGE
Diego Karasu
«Recomendable película para amantes o no del baseball, su elaborada puesta en escena y la genial dirección de actores encabezada por un magistral Robert Redford que convierte al jugador Roy Hobbs en la versión nueva del héroe griego que aparecia en la Mitología. El realizador Barry Levinson recrea con bastante fidelidad el ambiente que rodeaba el mundo del baseball en los 40’s (el glamour, la prensa deportiva, los noticiarios, los cromos, etc) trasportando y haciendo partícipe al espectador en una época en donde la televisión no habia invadido los hogares. La fotografía cargada de fuerza a cargo de Caleb Deschanel («Bienvenido, Mr. Chance» 1979, «La pasión de Cristo» 2004), imágenes que quedan intensificadas por las composiciones de Randy Newman consiguiendo momentos legendarios dentro de la Historia del Cine. Un film sobre la superación y el sacrificio en lo que cree. Se puede considerar esta película entre las mejores de Robert Reford». 8.
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