28 Days Later (Danny Boyle, 2002) – 113 min. –
Exterminio [Hispanoamérica]

Viernes 13 de marzo. En la TV nos anuncian que estamos en cuarentena y que, por consecuente, no podemos salir a la calle (por lo menos) hasta finales de mes. A mi yo hiperactivo no le hace especial ilusión eso de quedarse en casa tantos días metida. Pero bueno, “al menos tendré tiempo para ver pelis” – pensé.

Para inaugurar esta sesión de pelis en cuarentena, decidí que la primera película podría ser sobre pandemias y apocalipsis, por eso de estar un poco en armonía con la situación actual. La verdad que esto era un reto para mí, ya que nunca me han interesado demasiado este tipo de historias. Supongo que las pelis y series facilonas sobre zombies han hecho mucho daño.  

Así que escribí “Pandemia” en FilmAffinity y, después de descubrir diversos títulos interesantes y ver que El Séptimo Sello de Bergman encabezaba la lista – LOL – finalmente, me decidí por 28 días después de Danny Boyle, el director de Trainspotting – una peli que adoro desde siempre – , escrita por Alex Garland – director y guionista de la maravillosa Ex Machina – y protagonizada por el gran Cillian Murphy – conocido por ser un crack en El viento que agita la cebada, Origen y, como no, en (don’t fuck with the) Peaky Binders.

“Tiene que estar bien por narices” – me dije.

Los primeros minutos nos ofrecen un epílogo de cómo se produjo la situación en la que transcurre el resto del film. Se nos presenta un laboratorio de experimentación con animales, repleta de monos enjaulados en la peor de las condiciones. Un grupo de activistas al más puro estilo de PETA, entra para salvar a los pobres inocentes, sin saber que lo único que iban a hacer es liarla parda.

Después de la escena de presentación aparece el cartel: 28 DÍAS DESPUÉS…

La película arranca con un primerísimo primer plano del ojo de Jim (Cillian Murphy) abriéndose, seguido de un plano zenital de él desnudo en una camilla de hospital rodeado de cables y tubos. Está solo y reina el silencio. Sin verbalizar una palabra, se viste con lo primero que pilla y se va en búsqueda de respuestas a lo que cualquiera de nosotros se preguntaría en su situación.

Lo que le sigue es un bomboncito cinematográfico: una sucesión de planos increíbles de sitios emblemáticos de Londres en el más pleno ambiente post-apocalíptico, acompañado de una actuación magistral de Cillian Murphy y una banda sonora que acompaña y suma a lo narrado. En el transcurso de esta secuencia, el espectador va descubriendo junto a Jim lo que ha ocurrido, paso a paso, sin anticiparse.   

“Pagaría por ver cómo rodaron estas escenas” – pienso. Trafalgar Square, London Bridge, St. Paul’s Cathedral… lugares que todos los que hemos ido a la ciudad los hemos visto siempre llenos a abarrotar, sin la presencia de una sola alma. Es evidente que hay uso de FX, pero sólo el rodaje de esta secuencia debió precisar de una logística y organización impecable. Puntazo para el diseño de producción.

La primera vez que Jim ve a los infectados – que no zombies – es en una iglesia donde se ha producido lo que parece ser un suicidio colectivo. Alguien que parece ser el cura de la iglesia se levanta entre la multitud. ¿Para bendecirle con la gracia de Dios? No, para morderle, pues está infectado. Por suerte, es rescatado por Selena (Naomie Harris) y Mark (Noah Huntley), dos supervivientes unidos por las circunstancias que harán lo que sea por sobrevivir. En ese momento que se sienta el conflicto sobre el que se desarrolla la película: la lucha por la supervivencia.

Creo que, además de su realización, lo más interesante de esta película – y lo que la hizo especial en su momento – es que, a medida que van transcurriendo los minutos, te vas dando cuenta que el contexto en el cual se desarrolla es una simple excusa. Que en realidad, el director pretende ir más allá y criticar la condición humana, poniendo en evidencia cómo los humanos en situaciones límite, en vez de ayudarnos unos a otros y hacerlo todo más soportable, seguimos siendo profundamente egoístas hasta el punto de llegar a ser peor que la misma pandemia que nos ha traído a esta situación.

No me voy a poner a hablar de cuán aplicable me parece esta reflexión a la situación que estamos viviendo actualmente ni de cómo The Walking Dead me parece una copia barata y estirada hasta la saciedad como un chicle boomer maxiroll. Pero vaya, ya lo he dicho.

Evidentemente, no es una película para ponerte a alabar el séptimo arte ni que vaya a apoderarse de tu corazoncito cinéfilo ni a hacerte reflexionar sobre la vida y la existencia. Para eso hay otro tipo de películas. Pero si queréis ver una peli sobre pandemias que pueda aportarte algo más allá de ver zombies emitiendo sonidos irreproducibles corriendo detrás de humanos que toman malas decisiones, esta puede ser una buena opción.

Distribuida en España por 20th CENTURY FOX SPAIN

Nota del autor:
6,5 ██████ (Buena)

La película estubo en CARTELERA desde el 18 de julio de 2003.

Una crítica de PATRICIA HUGUET | Colaboración enviada

TRÁILER :

Written by LGEcine