Ick (Joseph Kahn, 2024) – 92 min. –
En un pequeño pueblecito un jugador de fútbol americano que se reconvierte a profesor de ciencias reencuentra su primer amor. Todo durante una crisis desatada por la emergencia de una especie de vegetal que crece de forma descontrolada por todos los Estados Unidos.
Película sencillita pero resultona de monstruo que asola una pequeña población. Una especie de cruce de Blob (por ser una masa que no para de expandirse), The Faculty, el ambiente y el componente de posesión y un poco del videojuego Metro 2033 Exodus (el aspecto es idéntico a las masas orgánicas que van creciendo (que oh, sorpresa! Se lidia igual con ellas). Resumiendo, un shoggoth de las novelas de Lovecraft ha decidido salir a jugar (porque al final casi todas las películas de terror de monstruo vienen de la misma fuente).
Realmente no aporta nada, en absoluto al género, pero es entretenida, aporta su dosis justa de barbarie y masacre. Gente gritando. Sangrecilla, etc. Es un tópico hecho película de 90 minutos. No por ello mala. Pero no la glorifiquemos.
A su favor cuenta con el protagonista, Brandon Routh (el capitán Atom del Arrowverso), el hombre que te embaraza solo con su sonrisa. En esta película un adulto amargado por haber conocido el lado jodido de la vida demasiado tiempo y que ha iniciado su camino de redención. Directo hacia la gloria.
Mucha gente ha citado a Mena Suvari como principal atractivo de la película (demasiado fetichista de American Beauty hay por aquí). No tiene tanto peso como para tenerla en consideración en la película.
Otro aspecto que me ha arrancado muchas carcajadas durante la película es la critica no encubierta a la sociedad actual. De la mejor manera posible. Mediante la parodia, para hacer ver mediante la risa que el rey esta desnudo y que demasiado incompetente le ha estado haciendo caso durante tiempo excesivo. A saber: ridiculiza la figura del aliade (alguien que finge interés mediante diálogos y posturas sociales absurdas con tal de intenta aparearse con miembros débiles mentalmente de la sociedad), de los agentes del gobierno (de incompetentes para arriba), de los negacionistas (es un momento mágico cuando niegan que lo que tienen delante sean cadáveres, que todo es un montaje del gobierno para recortar libertades).
Hay tanta parodia que podría recopilarse solo con tal de ponerla en las escuelas, queda poco títere con cabeza de los ídolos de paja actuales.
Pero la mejor, para el final, es cuando ridiculiza en primer plano el hecho de que todas las opiniones son validas y deben ser respetadas (soy un gran defensor de que ninguna opinión debe ser contrastada, deben ser atacadas salvajemente y solo las que no sean una opinión sino un hecho contrastado, deben sobrevivir en nuestra sociedad). Dejémonos de tonterías. Un científico no opina, expone un hecho y alguien que ha visto cuatro artículos de la Wikipedia como máximo debería de pedir perdón por abrir la boca.
Con todos estos mimbres tenemos ante nosotros una historia que nos narra una invasión completa del país por parte de una masa que ha sido ignorada demasiado tiempo (otra metáfora sobre como se comporta un gobiernno ante los problemas). Ahora que es una crisis donde la gente es ejecutada y poseída a partes iguales, toda reacción será tarde y mal. Así que tocara correr de forma enloquecida hacia donde se pueda.
Película apta si te gustan las masas informes, los alcohólicos conocidos o la gente que merece que se les de de comer a parte en situaciones de crisis.
La frase: ¡Que no te toque!
La escena: Cuando el pringue se desata y ataca la residencia estudiantil.
Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2024
Nota del autor:
6,0 ██████ (Correcta)
TRAILER : NO TRAILER, NO FUN 🙁
