きみの色 (Kimi no Iro) (Naoko Yamada, 2024) – 100 min. –

Correcta propuesta de animación japonesa que aborda la vida de unos jóvenes en el borde de la madurez, antes de empezar a sentir los primeros impulsos sexuales.

Una joven, ante su primer enamoramiento, incapaz de lidiar con la situación acabará creando un grupo de música aficionado con su interés romántico y un chico que se presenta en el lugar.

Nuestra protagonista es daltónica, confundiendo colores desde el nacimiento. Pero a cambio dispone de una curiosa habilidad. Dice ser capaz de distinguir el color del alma de la gente, como si de una cámara Kirlian humana se tratará. Solo siendo incapaz de verse a si misma, lo que le genera gran frustación.

A partir de este momento tendremos una película sobre la amistad, el abandono de la juventud y el inicio de la toma de responsabilidades.

Una película muy sencilla, sin doblez, que no busca romperte el corazón como muchas producciones de manga actuales. Sino simplemente acompañarte en ese viaje, un poco cómico, un poco tonto pero interesante con el que podemos sentirnos conectados de alguna manera.

No en vano, cada personaje representa una de las frustraciones de la juventud. El miedo a lo que se dirá, el miedo a decepcionar a los demás o la decepción sobre uno mismo. Límites auto impuestos que si bien constriñen la vida de nuestros personajes en cierto momento de la vida seguramente nos han afectado a nosotros mismos.Una película sobre la aceptación, la realización de nuestros sueños, aunque sea por un breve tiempo y la fuerza que se puede extraer de las amistades. De gente que te aprecia y te acepta como eres.

A nivel de animación podría decir que es correcta, pero esta lejos de grandes producciones (sigo teniendo en mente que no se ha superado Your Name, Berserk o la adaptación del Capitán Harlock, al menos por lo que yo he visto). Jugando muy bien con las paletas de colores, representando la visión de nuestra protagonista, en algunos casos llegando a jugar con los dibujos en tinta china que bien me recuerdan al típico ecualizador visual musical. Con otro detalle sutil que me gusta bastante.

Fijaros que cuando un personaje representa inocencia o pureza solo será dibujado con lineas curvas, llegando a tener caras y ojos completamente esféricos. Mientras que si se comporta de forma más adulta o reflexiva pasa a ser dibujado angular mente. Un detalle sutil, que me gusta, representando ese grado de perfección religiosa asociado al circulo.Solo le recrimino a nivel de animación que no me gusta nada como dibujan las orejas, una tontería, pero hay una cierta imperfección anatómica en como diseñan los agujeros de las orejas. Soy así de obsesivo con estos temas.

Mencionando el tema religioso ahí, no hay de que preocuparse, es solo un detalle adicional de la película. Por el escenario en si mismo y las reacciones que produce. Llegando a ser muy cómico el contraste de que la más religiosa de las protagonistas no pare de pecar (aunque sean tonterías) y busque perdonarse a la mínima. Siempre agradezco un grado de irreverencia. Por los personajes que son más fuertes en ese tema, lo bueno es que te los muestra como las personas que son, con su vida, pasado y moral propia. Lejos de los autómatas que se ven en otras producciones más occidentales.

A nivel musical, el plato fuerte a diferencia de otras producciones donde la banda sonora esta presente en el oído desde el primer minuto, aquí se guardara la artillería para la actuación final. Mencionando como un detalle de calidad la inclusión del theremin como instrumento importante de la película. No en vano ese invento soviético se decía que era el que creaba la música del alma. Muy adecuado para una película que trata tanto ese tema.

Habría agradecido más que se llegara a animar el color de la música en si mismo. Yendo un paso más allá.

Este resguardar la artillería que he mencionado me hace pensar en que tal vez es una producción de no mucho presupuesto, lo cual no es algo malo en si.Resumiendo, una propuesta correcta, algo divertida y tontorrona, que puede ver toda la familia sin cortarse las venas. Ni siquiera en su momento final, que te deja con una sonrisa.

Muy recomendable si te gusta ver religiosos pecando, la música de theremin o no ir de excursión.

La frase: Dame paciencia para aceptar lo que no se puede cambiar.

La escena: El concierto de rock. Por supuesto. En la primera canción note influencias de Kraftwerk y Depeche Mode. La segunda parecía una canción pop de los 80 y la ultima me recordaba a dance japones. Muy interesantes todas.

Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2024

Nota del autor:

6,5 ██████ (Correcta)


TRAILER V.O.S.:

 

Written by Oscar Hidalgo

Cinéfago demente