Eliminado (Unfriended) (2014): Slasher cibernético para Millennials

El slasher –moldeado por películas como Halloween (1978), Black Christmas (1974) y Viernes 13 (1980) y cuyas raíces se pueden hallar en el giallo italiano (*) – siempre ha empleado un subtexto cargado de sesgos morales respecto a temas que preocupan a la sociedad. No es coincidencia que en las producciones de los 80s el sexo fuera castigado con la muerte cuando la promiscuidad en los jóvenes era un asunto que perturbaba a los padres de familia.

Sucede que estamos en otros tiempos y lo que dio de qué hablar en el pasado ha sido sustituido por nuevas cuestiones propias de los Millennials (o Generación del Milenio o Generación Y) como el ciberacoso y el peligro de alojar información personal en línea. Es allí cuando aparece Unfriended aprovechándose de un tema tan popular para tomarlo como base de su trama y adaptando las tretas del slasher a un nuevo formato del metraje encontrado en el que todo está narrado desde la interfaz de un computador.

(*) El cine giallo es un subgénero cinematográfico de origen italiano (con vigencia en los 70), derivado del thriller y del cine de terror, caracterizado por una tendencia a recrearse en la violencia explícita rayana en lo morboso, que, sin embargo, suele ser tratada de un modo deliberadamente irreal y estilizado. [Fuente: Wikipedia]

La historia trata sobre seis amigos que mientras chatean por Skype, empiezan a recibir mensajes de Laura Barns, una joven que se suicidó un año antes tras ser humillada por internet y quien al parecer busca venganza. Puede que a algunos les parezca que grabar una película utilizando esta estética es un simple capricho. Sin embargo (y teniendo en cuenta el público objetivo) no había mejor manera de hacerlo. Es una forma de contar la historia de tú a tú para esta generación.

Si bien al inicio del filme es posible que creamos que será difícil prestarle atención a todo lo que está sucediendo en la pantalla de la protagonista, resulta fácil concentrarse en lo que el director desea que nos concentremos. Quién sabe, puede que quienes hemos estado tan expuestos al mundo cibernético lo hagamos debido a lo multitarea que somos en línea. El punto es que es de aplaudir que se logre convertir la narrativa en algo sencillo cuando su formato hubiese podido jugarle en contra.

Más allá de felicitar a Unfriended por esto y por experimentar con esta novedosa forma de hacer cine, está el cómo aborda sus temáticas. A medida que avanza la trama vemos que todos los personajes tienen algo por esconder, un secreto que les puede arruinar la vida. Lo preocupante (y lo que genera tensión) es el hecho de que estos salgan a la luz en la internet porque como lo menciona Laura Barns en un punto de la película “lo que ustedes hicieron vivirá aquí para siempre”. Esto hace que nos preguntemos: ¿qué tan seguro es subir información a nuestras redes sociales? Y cuando cometemos un error en nuestras vidas, ¿quién nos garantiza que en la red se olvidarán de ello y no se volverá viral?
El tema del ciberacoso también plantea varias reflexiones y funciona como el factor pecado para justificar las muertes de distintos personajes. Habiendo mencionado esto, aprovecho para recalcar lo pésimas que resultan. De todos modos, en un formato tan limitado, era difícil que lucieran terroríficas.

Aun con sus numerosas fallas, Unfriended resulta divertida, tensa por momentos y se agradece su forma de tratar un asunto tan actual. Estamos presenciando la versión beta de un nuevo género que puede ser la alternativa al ya tan gastado metraje encontrado (o el inicio de una estética que será explotada al máximo por Hollywood durante los próximos años).

Distribuida en España por UNIVERSAL PICTURES SPAIN.