Feliz día de tu muerte (2017): Muerte en bucle

El estudio que está detrás de Happy Death Day, Blumhouse  Productions, se ha convertido en un nombre que hace arrodillarse a los fanáticos del cine. La compañía, dirigida por Jason Blum, se especializa en películas de micro-presupuesto, y desde su primer éxito, Paranormal Activity (2007), ha seguido en alza. Hasta la fecha, es más  conocida por las exitosas franquicias Insidious y Sinister y este año tuvo dos éxitos importantes con Múltiple y Déjame salir. Si bien Happy Death Day no tiene el ingenio de otras películas que hemos visto de la productora, sigue teniendo su frescura y resulta muy entretenida.

Una cosa que debería mencionarse directamente es que no estamos delante de un film de terror. Es una comedia de terror y para nada gore, la sangre brilla por su ausencia. Esto es particularmente interesante cuando se considera que el director detrás de esto, Christopher Landon, escribió anteriormente las películas de Paranormal Activity 2 a 4 y Disturbia. Tiene muchos puntos fuertes el film del que tratamos pero puede dejar a los fanáticos del terror con ganas de más.

El argumento es sencillo: Tree despierta el día de su cumpleaños con un montón de problemas y al finalizar ese día, es asesinada. Al día siguiente se vuelve a despertar del mismo modo y en el mismo lugar que el día anterior y entiende que ese día vuelve a repetirse en bucle, hasta que consiga averiguar quién es su asesino y logre abatirlo.

Si bien la película ha sido descrita repetidamente como una premisa de Atrapado en el tiempo (1993), también tiene tintes de  Scream (1996). Parece bastante simplista y no tiene en cuenta su nueva ejecución de la historia, que es inteligente y muy consciente de sí misma. Se mueve a buen ritmo, no es demasiado larga y tiene suficientes giros y vueltas para mantener al público invertido. Además de tener grandes momentos de comedia, también tiene un elenco excelente, con actores relativamente nuevos en la escena (es posible que reconozcáis a Jessica Rothe de un papel secundario en La La Land (una de las amigas del personaje de Emma Stone) o Israel Broussard de The Bling Ring) y la narrativa se mantiene firme por sí misma.

Cabe destacar que la película no es perfecta y parece que podrían haberla pulido un poquito más,explotando ese elemento de película sobrenatural (dado que ella regresa de entre los muertos y continúa reviviendo el mismo día). Aún así, los agujeros en la trama no son lo suficientemente sustanciales como para restarle valor de entretenimiento a la película. Pudo haber sido mejor, pero el Happy Death Day sigue siendo una muy buena opción para la cartelera.