파과 (Pa-gwa) (Min Kyu-dong, 2025) – 131 min. –
The Old Woman With The Knife (Título internacional)
Obra coreana sobre asesinos crepusculares y enfrentamiento generacional entre veteranos y sangre nueva que viene con ideas diferentes para con el negocio. Una esencia que hemos visto en muchas obras coreanas, pero no por ello deja de ser interesante.
Dirigida por Kyu-Dong Min (que le he visto en Horror Stories) con una maravillosa Lee Hye-yong como protagonista. Aportando a KimSung-cheol como coprotagonista (de mi adorada “The night owl”).
Película con toques a León, el profesional (por el asesino veterano), pero mucha mucha más influencia de la película “Asesinos” (la de Banderas y Stallone). Aún así, esta realmente basada en una novela de 2018 del mismo título que la película (Pagwa).
En este metraje se nos narra la existencia de una red de asesinos, que pretenden limpiar la sociedad de elementos perniciosos. Es decir se dedican a eliminar a abusadores y gente chunga, siguiendo la petición del cliente para que haya un buen desquite. Llegando a donde no llega la policía.
Esta red acogerá a una muy joven protagonista que no tenía donde caerse muerta para entrenarla y transformarla en el cuchillo más afilado de su arsenal. Para llegar a la vejez y aun así seguir siendo una leyenda que inspira terror en el resto de la plantilla laboral. Pero el tiempo no pasará en balde y nuestra matarife (pues siempre intenta solucionar el trabajo con arma blanca) empieza a notar como las enfermedades y decrepitud le empiezan a atrapar a su pesar.
El retiro, la muerte o el olvido es lo que le espera y no sabe en que orden. Mientras mira hacia atrás y observa que tiene una vida que simplemente ha consistido en llenar los pulmones de aire, no habiendo hecho nada más ni teniendo a nadie con quien compartir el tiempo que le queda. Produciéndole que empatice con la primera persona que le ofrece una mano amable y una causa justa.Al mismo tiempo en la organización aparecerá una nueva promesa, un asesino joven, impulsivo y violento que confiesa que lo único que le gusta de su trabajo, no es su labor, es el matar en si mismo. Alguien que sabe cosas del pasado de nuestra protagonista y la tiene como objetivo, con la cual colisionará múltiples veces.
Ante nosotros tenemos una película dramática, profunda y reflexiva. Más que una película de acción en si misma. Eso si, salpicada con escenas de buenas y estéticas muertes. Muy pulidas y profesionales para ir degenerando en simples matanzas a medida que avanzamos. Siguiendo la tónica coreana tenemos peleas cuerpo a cuerpo con arma blanca y más litros de sangre de los que podría haber en una persona normal.
Por otro parte, el uso del cuerpo es bastante realista, mostrándonos lo importante que es la técnica para sobrevivir en ese ambiente. Pero que por mucha técnica, si la diferencia de fuerza, edad o numero es manifiesta, poco hay que hacer. La brutalidad a veces simplemente es apabullante. Como veremos en la batalla de la discoteca. Me gusta especialmente que la película tenga ese detalle. Para mantener un atisbo de realidad.Tenemos momentos muy frenéticos, pero no largos tiroteos. Habiendo uno solo al final y que para mi gusto no sería necesario. Pudiendo eliminarse, para acortar una película larga de por si. Además rompe por completo con el estilo de la película, pasando de unas situaciones más o menos realistas a una narración casi superheróica (recordemos, persona con incipiente Parkinson).
Como si después de una película más o menos bien narrada decidieran despedirse con una traca final. Desdibujando un drama que al final esta apelando a la sensación de soledad y realización. Donde cada persona solo busca estar con alguien que le reconozca y le diga que le gusta tenerle cerca. Incluso de los más inesperados. Con una subtrama sobre nunca abandonar tus valores que te definen.
He mencionado varias veces la palabra drama. Normal en un metraje coreano, donde les gusta la lágrima en demasía. Aún así, no es un rodaje lacrimógeno de por si. Alejado de lo que sería un Sin Perdón. Sino de los que dan para pensar al acabar y ponernos en la situación del personaje, preguntándonos que podría ser de nosotros. ¿Tuvimos una buena vida? ¿Alguien nos recordará?
Es un rodaje muy entretenido, cogiendo lo mejor de este género crepuscular y poniéndole el lazo de buenas escenas de acción y una buena banda sonora.Permitiéndose incluso momentos poéticos, como el hecho del entierro con gusanos (que en la imaginería asiática, se usarían para limpiar el karma de una persona hasta donde se).
Película recomendable si estas entrando ya en una edad que no es la juventud. Si te gusta el uso recreativo de cuchillos o verte enterrado vivo a mala idea.
La frase: Incluso un cuchillo romo tiene su utilidad.
La escena: El asalto en la discoteca y posterior rescate. Por lo intenso, me recordó de lejos a No tears for the dead.
Vista con PASE DE PRENSA en el Festival Internacional de Sitges 2025
Nota del autor:
6,5 █████ (Correcta)
TRÁILER V.O.: